martes, 25 de junio de 2024

Poemas de Catz I - Es mejor el silencio

"¿No me estaré pasando de sentimental? Nah..."
Aunque ya anteriormente había publicado en el blog una entrada sobre mis poemas, siento que sólo podemos considerarla como una especie de "introducción" al tema, con un mayor enfoque en lo que fue mi historia (usemos dicho término) como autor de textos poéticos. Este sería, entonces, el que podríamos considerar como el primer post dedicado a mis escritos, siendo el motivo de que haya elegido usar el título "Poemas de Catz I", comenzando lo que -espero- tomará la forma de una serie de entradas sobre el tema.

Está de más aclararlo, y como ya dije en su momento, pero nunca me he considerado a mí mismo como un autor de mucha calidad literaria. A pesar de mi pobre autoconcepto, no quisiera que mis poemas se quedaran en el olvido, que es en donde han permanecido ya durante más de una década (o dos, en algunos casos). No tanto porque sean buenos, sino por lo que representaron en su momento. Podrá sonar exagerado, pero casi todo lo que escribí tuvo una razón de ser: no fueron cosas compuestas por capricho u obligación... Digo, no es como que me estuvieran pagando por escribir. Era algo que hacía porque quería, o para satisfacer la necesidad de dar rienda suelta a mi triste afán literario.

Para arrancar la nueva serie de posts, he elegido un poema que se escribió en dos ocasiones: la primera de ellas en Diciembre de 2006, habiéndose publicado en Arihua.net. Fue uno de los textos que perdí cuando mi cuenta en dicho sitio web fue eliminada por falta de actividad (historia que ya conté), sin haber tomado la precaución de conservar una copia. Un tiempo más tarde, en... tal vez Junio o Julio de 2010, lo escribí de nuevo para publicarlo en DeviantArt. Naturalmente, la segunda versión del escrito tiene sus diferencias con la primera, puesto que no podía acordarme al 100% de lo que había compuesto cuatro años antes. Pude conservar algunas líneas que recordaba particularmente, pero ambos poemas no dejan de ser, al final, muy distintos entre sí.

Bien; sin más, vamos con el poema:


Es mejor el silencio
(Verano de 2010)

*****

Si quieres marcharte, 
no digas nada...
es mejor el silencio
entre nosotros.
Guarda la crueldad
de tus palabras
para que puedas escapar
de mis brazos
en el refugio de la distancia.

Prefiero que tus labios
mueran en calma,
con la ausencia de tu voz.
Prefiero que te vayas
de mi lado para siempre
a escucharte pronunciar una mentira
que me regale la falsa esperanza
de un amor
que no existe ya para nosotros.
Aléjate de mí
si tu corazón se ha cansado
de mi cariño;
pero no permitas que tus ojos
me castiguen con el desprecio:
no me mires derrotado,
no me niegues el placer de tu silencio.

Quisiera escuchar en mi angustia
la suave melodía
que forman las lágrimas
de mi alma al confundirse
con el polvo
de los sueños rotos.
Deja que sufra tu abandono
en mi amarga soledad:
aguardaré la noche
recordando la caricia de tu cuerpo,
la ilusión hermosa
que me entregaba la calma
de tu ojos,
el suave calor de tus manos.

Ignora el dolor que me destroza,
el juramento que abandonas al dejarme.
Vete sin palabras:
volveré al lugar de la derrota...
Y es mejor el silencio entre los dos
cuando la única esperanza
que puede quedar en el alma
es ya, tan sólo, la propia
ausencia de toda esperanza...

*****


La historia de Es mejor el silencio es curiosa... y por más de un motivo. Como digo, originalmente se escribió a fines de 2006, poco después que cumplí los 21. A pesar de que lo redacté como un poema de amor, en realidad fue mi manera de lamentarme de que, en esas fechas, estaba regresando (después de un periodo de "pausa" que... no salió muy bien) a estudiar una carrera universitaria a la que le había perdido cualquier atisbo de cariño (llegué a odiarla, de hecho). Con la frase "volveré al lugar de la derrota" me refería exactamente a ello: aceptar las cosas, y regresar a un lugar que no había planeado volver a pisar jamás. Así que, en efecto: Es mejor el silencio no es el producto de una decepción amorosa, sino una representación de mis errores de estudiante universitario.

Ahora bien, una de las cosas que llaman mi atención sobre Es mejor el silencio es que, a pesar de que está muy lejos de ser uno de mis mejores poemas, sí que ha sido el más gustado. Alcanzó bastantes favoritos cuando lo publiqué en DeviantArt, y recibí comentarios muy positivos que venían de personas que ni siquiera tenían mucha afición por la poesía. Mi amigo Al, quien era más de dibujos que de letras, siempre me decía que era su favorito entre mis trabajos, e inclusive me llegó a mencionar que quería ilustrarlo. Yo le comentaba, por mi parte, que no parecía un buen poema para ser representado en dibujo... pero la cosa quedó en plan, como muchas otras.

Ya por último, les contaré que el nombre del poema no fue mi idea. De manera indirecta, se le ocurrió a mi madre. Ya he dicho en otras ocasiones que 1998 fue un año de descubrimiento musical para mí. Una canción que conocía sólo de nombre, pero que jamás había escuchado, era The Sounds of Silence de Simon & Garfunkel. Y digo que la conocía "de nombre" porque mi padre la mencionaba bastante, y de hecho tenía el vinilo de The Concert in Central Park... que de poco servía, ya que nuestra tornamesa había dejado de funcionar mucho tiempo atrás. En una ocasión, mientras disfrutaba de un cassette de musical instrumental que había comprado por pocos pesos, reconocí una de las melodías: era la misma de una canción de  Los Yorsy's que había escuchado poco antes en Radio Centro 770, la cual me había encantado, pero no tenía idea de su nombre. El cassette que les cuento afirmaba que el tema era The Sounds of Silence... 


Recuerdo que le pedí a mi padre que me diera detalles sobre esta canción, y que me dijera si conocía otros covers al español aparte del de Los Yorsy's. Quien reaccionó primero fue mi madre, empezando a tararear "es mejor el silencio...". Se acordaba de esa parte de la letra, pero no del intérprete o más detalles del cover. ¿Mi padre? No conocía siquiera el de Los Yorsy's. También le pregunté al Lic. Octavio González, mas no supo decirme mucho acerca de la versión que mi madre recordaba. Por años la busqué, descubriendo otras adaptaciones en el camino, todas muy buenas (como la del argentino Sergio Denis, la de Los Módulos, José Feliciano...). Fue más o menos por estos días del año pasado cuando, sin realmente buscarla, me encontré con la versión a la que seguramente se refería mi madre: es de la cantante mexicana Tehua, perteneciente a su primer disco


Este cover me ha gustado muchísimo. Tanto en interpretación como en letra, diría que es mi adaptación favorita de The Sounds of Silence a nuestro idioma (aunque, a decir verdad, casi todas las versiones en español del tema son buenísimas. De hecho no sería mala idea crear un post en el que pudiéramos hablar de ellas a profundidad. Más adelante). Si bien, aunque su letra dice "Mejor es el silencio", esa pequeña confusión en la memoria de mi madre me dio la idea para no sólo bautizar al que terminó siendo mi poema de mayor éxito, sino que del propio título se desprendió todo el mensaje del texto. Ante el dolor, callar. Ante la derrota, silencio... Es un buen recuerdo de mis años juveniles. Y, por supuesto, de mi madre.

Nos leemos pronto.

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